Mitos y realidades sobre los seguros de vida
¿Es buena idea contratar un seguro de vida? Sobre esta decisión sobrevuelan una serie de mitos no acordes con la realidad. Resumimos en el post algunos de ellos, y argumentos para confirmar que el seguro de vida puede ser una muy buena inversión, para prevenir situaciones complicadas en el aspecto financiero.
Cuando se trata de seguros de vida, existen numerosos mitos que pueden distorsionar las creencias de las personas y distanciarlas de la realidad. Por ello, es importante desmitificar estas creencias para entender los beneficios que ofrecen los seguros de vida. A continuación, analizaremos, tanto cualitativa como cuantitativamente, algunos de los mitos más comunes y las realidades que los desmienten.
Mito 1: “Solo las personas mayores necesitan un seguro de vida”
Realidad:
El seguro de vida es útil para personas de cualquier edad, especialmente aquellas con responsabilidades financieras. Aunque es cierto que las personas mayores pueden necesitar una cobertura para garantizar la tranquilidad de sus seres queridos, la juventud es el mejor momento para contratarlo: las primas son significativamente más bajas cuando se es joven y se puede asegurar una buena cobertura a largo plazo. Además, si se espera al futuro puede ser que, previo a la contratación, se contraiga alguna enfermedad que limite o excluya la cobertura.
En números:
Según un estudio realizado por INESE en 2023, la prima media del mercado para asegurar un capital de 120.000€ en una persona de 35 años era de 198,58€; mientras que, para una persona de 50 años, la prima ascendía a 833,19€.
Mito 2: “El seguro de vida es demasiado caro”
Realidad:
La idea de que los seguros de vida son costosos no siempre es cierta. El coste de un seguro depende de muchos factores como la edad o la salud del asegurado, el tipo de póliza y el capital cubierto… Existen diferentes tipos de seguros que pueden adaptarse a la situación de cualquier persona.
En números:
Recogiendo datos del estudio realizado por INESE, observábamos como una persona joven (35 años) que quiera asegurar un capital de 30.000€, tan solo debería pagar 56,71€ al año. Es decir, menos de 5€ al mes.
Mito 3: “Mi seguro de vida a través del trabajo es suficiente”
Realidad:
Si bien es muy positivo que muchas empresas ofrezcan seguros de vida como parte de los beneficios laborales a sus trabajadores, la cobertura suele ser limitada. Normalmente, estos seguros van en función del salario del trabajador (suelen cubrir una o dos veces el salario anual), lo que no siempre es suficiente para cubrir todas las necesidades financieras de una familia a largo plazo. Además, el seguro está sujeto al trabajo, por lo que, si pierdes tu empleo, podrías perder esta cobertura también.
En números:
Los seguros de vida aportados por la empresa resultan insuficientes para cubrir las necesidades de los beneficiarios del fallecido. El monto promedio de las hipotecas en España se sitúa alrededor de los 150.000€. Por su parte, los seguros de vida que ofrecen las empresas aseguran, por norma general, entre 1 y 2 veces el salario anual del trabajador, el cual es de algo más de 30.200€ en promedio en nuestro país. Con esto, queremos mostrar que, en la gran mayoría de las ocasiones, el importe asegurado es insuficiente para hacer frente a la deuda de la hipoteca, que no aliviará económicamente a la familia.
Mito 4: “Solo las personas que tienen problemas de salud necesitan un seguro de vida”
Realidad:
Contratar un seguro de vida cuando se está saludable es la mejor estrategia, ya que las primas son más bajas y se garantiza la cobertura antes de que surjan problemas médicos. Posponer la contratación de un seguro hasta enfrentar problemas de salud puede incrementar el costo de la prima o, en ciertas situaciones, incluso el rechazo de coberturas.
En números:
Acorde a los datos aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), las muertes súbitas o inesperadas, ya sea por problemas cardíacos o por accidentes, representan un 30% de las muertes no naturales. Por ello, tener una red de seguridad para la familia puede cumplir un papel fundamental en la recuperación económica.
Mito 5: “Es mejor invertir el dinero que gastar en un seguro de vida”
Realidad:
Las inversiones son parte importante de una planificación financiera, pero no deben reemplazar al seguro de vida. Los seguros de vida garantizan un capital en el fallecimiento del titular a cambio de una prima cuyo importe es muy bajo si comparamos con el capital necesario para realizar inversiones o productos de ahorro.
En números:
Según UNESPA, en 2022 se pagaron un total de 1.400 millones de euros en indemnizaciones por fallecimiento. Esta cifra, supone un pago promedio de 45.000€ para más de 70.000 familias.
Conclusión
Existen muchos mitos en torno a los seguros de vida que pueden confundir a las personas a la hora de contratar un seguro de vida. Sin embargo, al entender las realidades detrás de estos mitos es posible tomar decisiones más informadas y garantizar la protección de los seres queridos. Un seguro de vida no es solo una inversión en el futuro de tu familia, sino una forma de asegurar su estabilidad y tranquilidad.