Novedades legislativas en materia de pensiones
El año 2024 nos trae novedades que afectan a las pensiones. Algunas de las nuevas medidas vienen motivadas por el desequilibrio entre número de cotizantes por pensionista; esto, unido al descenso de la natalidad, hacen recomendable complementar la prestación pública a través del ahorro privado.
Entre las principales novedades en materia de pensiones para este 2024 destacamos el incremento de la edad ordinaria de jubilación, incremento de las pensiones mínimas y no contributivas por encima de la inflación, así como del complemento de brecha de género.
En 2024, la edad legal de jubilación ordinaria son los 66 años y 6 meses en el caso de que se acrediten menos de 38 años cotizados. En cambio, los trabajadores que hayan cotizado 38 años o más, en 2024 podrán jubilarse con 65 años.
Existe la opción de jubilarse hasta 24 meses antes de la edad legal ordinaria en caso de jubilación anticipada voluntaria, es decir, a partir de los 63 años siempre que se haya cotizado un mínimo de 38 años o a los 64 años y 6 meses si se ha cotizado menos.
En el caso de jubilación anticipada involuntaria o forzosa, la edad de retiro profesional se puede adelantar hasta 48 meses, es decir, a partir de los 61 años si se han cotizado 38 años o más o a los 62 años y 6 meses, si no se ha alcanzado esa cifra de cotización.
Subida del MEI
La nómina también se verá impactada por una subida del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI). Se traduce en un impuesto para financiar la próxima jubilación de la generación más numerosa, la del “baby boom”. Este año, el MEI supone una cotización adicional del 0,6%. De este porcentaje, los 0,5 puntos corresponden a los empresarios y el 0,1% le es detraído a los trabajadores.
A partir de 2024 ha entrado igualmente en vigor el incremento progresivo por encima del IPC de la base máxima de cotización, que se incrementará cada año, hasta 2050, en un porcentaje igual a la revalorización de las pensiones (según el IPC interanual medio), más un incremento adicional anual de 1,2 puntos porcentuales. Esto implicará un aumento acumulado del 38% hasta 2050.
La base máxima de cotización subirá en el porcentaje que se hayan revalorizado todas las pensiones en su modalidad contributiva (es decir, en un 3,8%) más el 1,2%. O sea, un 5%.
Las pensiones contributivas han subido también en 2024 en torno a un 3,8%. Asimismo, las pensiones mínimas han aumentado entre un 5% y un 7%.
En 2024, también ha comenzado a aplicarse la subida extra del complemento de brecha de género. Este complemento se ha incrementado un 10% en 2024 y otro 10% en 2025, adicionales a su revalorización anual según el IPC.
Menos cotizantes por pensionista
A diferencia de esta subida en los importes de las pensiones y en las cotizaciones sociales, el número de cotizantes por pensionista cada vez es menor, de media en España menos de 2 cotizantes por pensionista, así como la tasa de natalidad que registra mínimos históricos, según datos de INE, poco más de 320.000 niños nacieron en el último año.
Estos datos no hacen mas que demostrar que el ahorro privado destinado a la jubilación se convierte en esencial, por lo que el esfuerzo para complementar los ingresos derivados de la pensión publica de jubilación ha de ser mayor y sólo podrá alcanzarse realizando una rigurosa planificación previsional en manos expertas.