2023, ¿año de récord para el turismo internacional en España?
Estamos en pleno proceso de recuperación en el sector turístico y, de seguir esa evolución positiva a lo largo del año, nos aproximaríamos a las cifras a las del año 2019, previo a la pandemia: 2023, podría ser un año récord para un sector de tanta incidencia en el PIB español (12,2% en 2022) y en el empleo.
Los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística sobre Movimientos Turísticos en Fronteras, correspondientes al mes de abril, ofrecían la cifra de la llegada de 7,2 millones de turistas internacionales en ese mes, un 18,5% más que en abril de 2022. En el acumulado de 2023, el número de extranjeros que nos han visitado en el primer cuatrimestre roza ya los 21 millones (+32,4%). De estos, casi 17,5 millones lo hacen por ocio y vacaciones, mientras que por negocios llegan 1,5 millones, y más de 2 millones de personas por otros motivos.
También crece el gasto
Otro dato que apunta a esas expectativas de un buen año para el turismo en España es el relativo al gasto que esos visitantes que llegan desde fuera de nuestras fronteras realizan en nuestros establecimientos hoteleros o de restauración, tiendas u otros servicios. En este concepto sí podemos decir que, en los cuatro primeros meses del año, ya hemos superado los datos de ese periodo de 2019 (antes de la pandemia). Los 25.681 millones de euros gastados por los turistas internacionales suponen casi un 15% más que en 2019.
Tomando como referencia los promedios de abril, podemos decir que la duración de la estancia de los turistas internacionales es de casi 7 días, con un gasto medio diario de 173 euros.
En el aumento de las cifras de gasto se deben considerar los efectos de la subida de precios, pero no cabe duda de que los incrementos apuntalan las expectativas para el presente año.
Los británicos, los turistas más habituales
En las estadísticas de visitantes extranjeros, que no contemplan los tránsitos ni las visitas ocasionales de un día sin pernoctación, aparece el Reino Unido como el país con mayor número de turistas que se sienten atraídos por todo lo que España les ofrece. En total, son 3.949.353 los británicos que han llegado de enero a abril.
A continuación, figuran en los puestos siguientes Francia y Alemania, con 2.784.186 y 2.671.641 turistas, respectivamente, y con menores cifras Italia, Países Bajos, Portugal y los países nórdicos. De América han llegado más de dos millones, de los que más de 850.000 son de Estados Unidos. Y del resto del mundo, también una cifra superior al millón de viajeros.
Canarias, el destino más elegido
Los atractivos turísticos de Canarias resultan de gran interés para el mayor porcentaje de los turistas llegados en el primer cuatrimestre del año: casi 5 millones de visitantes extranjeros han elegido las islas como su lugar de vacaciones. as comunidades autónomas con mayor número de turistas que están a continuación son Cataluña (4,3 millones), Andalucía (3,1 millones), Comunidad Valenciana (2,49 millones), Madrid (2,24 millones) y Baleares (1,85 millones).
En las tablas estadísticas (datos exclusivamente de abril) figuran las preferencias de los británicos por Canarias, Andalucía y Comunidad Valenciana, mientras que los alemanes prefieren Baleares, los franceses se decantan en su mayoría por Cataluña, y en Madrid reciben, en mayor cantidad, a turistas norteamericanos.
Más del 60% de las pernoctaciones, en hoteles
Los establecimientos hoteleros son los que reciben a casi dos tercios de los visitantes, mientras que el porcentaje restante se reparte entre viviendas de alquiler, otros alojamientos de mercado (con pago por estancia) y residencias en propiedad, familiares y amigos. De estas cifras se deduce el peso que el segmento de establecimientos hoteleros tiene en el conjunto del sector turístico, y el potencial que apunta si se confirman los datos de crecimiento.
Aparte del empleo y de la aportación al conjunto de la economía nacional, cuyos datos ponen de relieve la pujanza del sector, cabe considerar su atractivo también desde el punto de vista de la inversión, tanto directamente en empresas del sector que cotizan en los mercados como en otras soluciones alternativas, entre las que está la coinversión. En este caso, se trataría de una opción a largo plazo y con inversión en economía real (los propios activos) no correlacionada con la evolución en los mercados. Actualmente, existen instrumentos de inversión que permiten vehicular la entrada en este tipo de activos, con un objetivo de rentabilidad a largo plazo.