Los bancos centrales se apuntan a las monedas digitales: el euro digital avanza y la Fed pone a prueba su proyecto
El concepto CBDC (Central Bank Digital Currency), o moneda digital emitida oficialmente por los bancos centrales, avanza por todo el mundo. El Banco Central Europeo, la Reserva Federal norteamericana (Fed), y los bancos centrales de países como China, Francia, Nigeria o Suiza, tienen proyectos sobre dinero digital, para dar respuesta al desafío de un mundo cada vez más digitalizado y ofrecer facilidades para transacciones comerciales, a la par que un plus de confianza para vencer las reticencias que, para muchos, ofrecen las criptomonedas.
La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, declaraba hace unos meses que la Comisión Europea tendría listo dentro de poco la propuesta normativa sobre el euro digital, que daría soporte legal y seguridad jurídica a esta moneda virtual.
El euro digital, un complemento del efectivo
El Banco de España, en su web, define el euro digital como “una forma electrónica de dinero de banco central que todos los ciudadanos y empresas podrían utilizar —como los billetes, pero en formato digital— para realizar sus pagos diarios de manera rápida, fácil y segura. Sería un complemento del efectivo, no un sustituto”. Entre sus objetivos, como recuerda el BCE, estaría también la lucha contra actividades ilícitas y servir para evitar cualquier impacto no deseado en la estabilidad financiera y la política monetaria.
La implantación del euro digital tiene una fase previa de investigación, que se prevé que se prolongue hasta el otoño de este año. Mientras tanto, entidades financieras españolas, entre las que está Banca March, han creado un grupo de trabajo para desarrollar una prueba de concepto para evaluar las implicaciones e impacto del euro digital, tanto desde el punto de vista de la tecnología como de la operativa y el negocio.
La implantación del euro digital tiene una fase previa de investigación, que se prevé que se prolongue hasta el otoño de este año. Mientras tanto, entidades financieras españolas, entre las que está Banca March, han creado un grupo de trabajo para desarrollar una prueba de concepto para evaluar las implicaciones e impacto del euro digital, tanto desde el punto de vista de la tecnología como de la operativa y el negocio.
De igual forma, se pretende estudiar la forma en que el euro digital puede convivir con otros medios de pago actualmente utilizados. Para ello, se prevé la realización de pruebas que consistirían en el envío simulado de euros digitales persona a persona, pagos en comercios online y en tiendas físicas. Los bancos serían los depositarios de la moneda digital de sus clientes.
El dólar digital, también en pruebas
Por su parte, desde Estados Unidos llega la noticia del proyecto de prueba de concepto (PoC) del dólar digital, promovido por la Reserva Federal junto a empresas del sector financiero de este país y basado en la tecnología DLT (Distributed Ledger Technology), diferente a la del blockchain que emplean las criptomonedas.
En esta fase del proyecto, se busca estudiar la viabilidad de la implantación de un dólar digital dentro de un entorno de prueba. En él, el dólar se representaría como tokens y se liquidaría mediante reservas simuladas de banco central en un libro de contabilidad compartido por las entidades.
En ambos casos, tanto para el dólar como para el euro digitales, habrá que esperar meses —en el caso de Europa, al menos hasta finales de 2023 y puede que incluso en un plazo más largo— hasta que estas monedas digitales de banco central sean una realidad.